Es curioso averiguar cuántas veces puedes ponerte una camiseta de nuevo desde que decidiste que ya era para lavar. Cada vez que vuelves a ella, porque has recorrido el ciclo entero del resto de la ropa, la encuentras limpia y completamente utilizable incluso para ir junto a una chica mona en el autobús. Esto debe ser porque en éste último ciclo, la otra ropa ya se puso más sucia que ésta camiseta, que aún pertenece al ciclo anterior, y bueno, así sucesivamente.
Es genial porque yo no sé cómo lo he hecho pero he tenido esa mala suerte, por llamarlo de alguna manera, de que en todas las casas donde he estado últimamente, no podían, no tenían máquina, o no la podía yo lavar en algún lavabo. O cuando llegaba a un laundry, estaba cerrado… El caso es que llevo unas 3 semanas con la misma poca ropa (poca porque traje sólo una poca a las islas) desde que me la lavé en Cuba, en una máquina de esas manuales de plástico.
Pero oiga, cuando parecía estar pa tirarla, uno se ducha, la saca, y voilá, como nueva…
como nuevo.
A ver si encuentro pronto una lavadora o algo, pero si no…
…pues otro ciclo.
Desde el 15 de julio, ¿cuántas veces has lavado la ropa? o ¿cuántos ciclos ha habido?, por curiosidad.