Pues verás.
A las 22.30 me desperté sobresaltado, con esa sensación de haberme dormido sin recoger o lavarme los dientes, mi cuerpo me decía que faltaba algo. Pero en realidad yo ya sabía lo que le faltaba a mi cuerpo, lo que me faltaba a mí.
Cuando digo que las piezas encajaban y mi cabeza empezaba a dar vueltas, quiero decir que una idea que hasta el momento conocía como imposible, empezaba a flotar en mi cabeza como posible. En realidad, ¿qué es imposible en esta vida?